Limpiamos las sardinas bajo el grifo pero sin quitarles la cabeza ni las vísceras. Escurrimos bien.Las vamos poniendo en un recipiente con sal gorda. Reservamos mientras vamos preparando las brasas para asarlas. Nos dpodemos servir de la mitad de un bidón para improvisar la barbacoa, lleno de arena y en el que hemos puesto unas leñas para que se hagan las brasas.
Cuando las brasas estén listas, vamos espetando las sardinas de esta forma: con la caña, previamente remojada en agua para que no se queme, de forma cóncava, espetamos la sardina por en medio desde la espalda y atravesando el pecho dejando la espina por debajo de la caña. (Video de como espetar sardinas).
Vamos repitiendo con cada una de las sardinas hasta ensartar unas seis por caña.

Espetos en málaga
Colocamos los espetos en las brasas, poniéndolos primero por el lado de la espina que es la caña cóncava para que al darle la vuelta al espeto las sardinas se aguanten y no se desplomen.
Cuando estén hechas, las vamos desensartando con cuidado y colocando en una bandeja, regamos con zumo de limón y a comer con los dedos sin dejar que se enfríen y una buena rebanada de pan cateto. Acompañamos de una buena y fría cerveza o un buen tinto de verano fresquito. Están deliciosas. ¡Jo, la boca hecha agua!.
Cortesia de Cocinasana.net

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